«Ellos querían construirse una casa»: Los veracruzanos que murieron en el tráiler de San Antonio Texas, finalmente descanzarán en paz
Fueron entregados esta madrugada los cuerpos para darles digna sepultura, tras el traumático desenlace de sus vidas

Francisco de Luna – Naolinco, Ver.- Eran las 12:20 de la noche de este jueves 13 de julio cuando llegaron los cuerpos de los tres jóvenes que fallecieron en el tráiler de San Antonio Texas, el 27 de junio.
Ahí, en la comunidad de San Marcos, Atexquilapan, municipio de Naolinco eran cientos de personas que acompañaron a las familias para recibir los restos de Misael, Jair y Giovanni quienes tenían el sueño de construir una casa.
Frente a la iglesia, los vecinos esperaban las unidades que trasladaban los ataúdes. En el lugar bandas sonoras se escucharon al recibimiento. Esta noche, prácticamente la comunidad no durmió.
Una gran multitud caminó a la entrada donde está una virgen pintada en una gran roca. Vestidos de negro esperaban con velas. Ya eran las 12:20 de la noche cuando entraron al pueblo a la calle principal.
Afuera en calles, banquetas y balcones había gente a la espera de los muchachos. Mientras avanzaban los acompañantes, se escucharon canciones del género de banda como «Los dos carnales», «Mi último deseo», así como cantos religiosos.
Los féretros en colores azules y blanco, fueron bajados de las carrozas y entre llantos de la familia Olivares, los restos fueron colocados en el altar donde las amistades y conocidos del pueblo elevaban rezos y oraciones en memoria de los muchachos de 16 y 19 años de edad.
La señora Yolanda Olivares Ruiz, mamá de Jair y Giovanni, frente al altar durante la entrevista comentó que fue a mediados de junio cuando los tres partieron con rumbo a Texas en busca del llamado «sueño americano».
«Se fueron a buscar una mejor vida, pero les tocó la mala suerte de pasar por esta tragedia en la cual los perdimos. Eran jóvenes tranquilos, muy alegres y les gustaba mucho el deporte, el futbol».
Dentro de la casa azul y franjas color negro que se ubica en la calle 5 de mayo, justo atrás de la iglesia católica de San Marcos, llegaban los pobladores a dar el pésame a las familias. También llegaban con pan y flores para pasar las horas largas en vela.
En el altar hay decenas de fotografías de Jair, Giovanni y Misael en unas se les ve de viaje en Ciudad de México o con su equipo de futbol. Abajo están colocadas las cruces con los nombres de los jóvenes, así como tres balones esos que solían utilizar en el campo de fútbol de la localidad.
«Mi hijo Jair se ganó un trofeo hace un año. Fue el goleador de varios equipos y eran futbolistas, buenos jóvenes, muy buenos», narró la señora Yolanda.
Ella recuerda que se fueron con la promesa de ganar dinero en dólares y que con ello iban a construir sus casas, pues consideraban que con lo que ganaban de la elaboración de calzado artesanal no les alcanzaría para tener sus viviendas.
«Ellos allá no se iban a quedar. Ellos querían construirse una casa y empezar algún negocio para no pasarse toda la vida con la elaboración de calzado. Aquí aunque hay trabajo es muy mal pagado».
San Marcos es una comunidad que se ubica a casi 08 kilómetros de la cabecera municipal de Naolinco, en la región de Xalapa.
Aquí, el pueblo es de unidad. Cuando se enteraron de la desgracia y después de haberse confirmado, salieron a «botear» para poder cubrir gastos de los tres funerales.