Inflación se comerá los incrementos salariales en lo que falta del año e incluso hasta 2022
La inflación es uno de los peligros económicos más dañinos para los bolsillos de los consumidores y no parece que […]
La inflación es uno de los peligros económicos más dañinos para los bolsillos de los consumidores y no parece que dejará pronto de golpear la economía de las familias mexicanas.
Las alzas salariales al principio del año seguirán siendo por lo menos neutralizadas por el incremento de precio, pues según la Encuesta de Compensación 2021, realizada por la consultora AON, el 92% de las empresas consultadas tienen presupuestado incrementos a los salarios de hasta 4.9%, por debajo de la inflación actual y de que la que según las últimas expectativas del Banco de México (Banxico) se vivirá en los próximos meses.
En su última decisión de política monetaria, el Banco de México publicó por primera vez un apartado con sus pronósticos de inflación, mismos que presentaron una fuerte revisión al alza en la que se estimó que la inflación objetivo de +/- 3% no se alcanzaría sino hasta principios de 2023.
Si bien, Banxico confía en que la inflación será transitoria, ya comenzó a prever que esta durará más de lo anteriormente esperado, señalando incluso que posiblemente seguirá por encima del 5% durante los primeros meses del 2022, lo que significa que aunque por apenas unos puntos, la inflación seguirá comiéndose a los incrementos salariales que realicen los patrones.
El presidente Andrés Manuel López Obrado (AMLO) ha reconocido la labor del Banco de México (Banxico) por intentar de controlar el alza de precio de azota al país desde marzo, sin embargo, los intentos del banco central no han sido suficientes para evitar que en durante el primer semestre del año tres meses registraran incrementos salariales por debajo de la inflación, fenómeno que no ocurría desde el año 2017.
Si bien en julio, los datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) apuntan a que la tendencia parece haberse detenido al registrarse un incremento de los salarios reales -llamados técnicamente ex-post- de 0.62%, el encarecimiento de los precios de la canasta básica así como de los combustibles -excluyendo el Gas LP- siguen golpeando a los trabajadores.
Productos básicos por encima de la inflación
Si bien la inflación es un indicador general del comportamiento de los precios en su interior algunos productos se encarecen más que otros, lo que implica que algunos pueden pesar más sobre el gasto de las familias
Por ejemplo, la canasta de consumo mínimo, una versión ampliada de la famosa canasta básica alimentaria, que contiene una lista de algunos de los productos más utilizados no solo para la alimentación sino también para la higiene y cuidado personal, , presentó un aumento de 0.71 por ciento mensual y de 6.80% por ciento anual en julio, un punto por encima del incremento de 5.81% del mismo mes.
Otros productos de manera individual han registrado fuertes incrementos recurrentes durante toda la pandemia como los productos cárnicos (11.05%), mientras algunos otros comenzaron a encarecerse apenas este primer semestre como la tortilla cuyo incremento anual alcanzó en julio 14% más del doble que la inflación general.
Incluso los refrescos envasados han sufrido importantes incrementos hasta colocarse 6.56% por encima de hace un año, así como las taquerías y otro puestos callejeros que han subido 7%.
El incremento de precios se ha visto reflejado en los alimentos procesados debido al incremento de precio de las materias primas, pero también debido al incremento de otros de los productos básicos para la economía, los combustibles, que se utilizan para la producción industrial, cocción y transporte de los alimentos.
Los precios del Gas LP protagonizaron los incrementos del segundo trimestre del año, y aunque durante la primera quincena de agosto su precio cayó de golpe debido al regreso del control estatal, el precio de las gasolinas ha seguido presionando a los bolsillos de los consumidores como a los precios del transporte de mercancías.
Sin embargo, así como otros expertos, el subgobernador de Banxico, Jonathan Heath ha señalado que si bien los topes al precio del gas han tenido efectos inmediatos estos pueden ser “ilusorios”.